Juan Orellana | 29 de septiembre de 2017
Converso
España, 2017
Director: David Arratibel
Guion: David Arratibel
Reparto: Documentary, Raúl del Toro, María Arratibel, Pilar Aranburo, Paula Tellechea Género: DocumentalWebTres premios lleva ya cosechados este sorprendente documental: Cádiz, Pamplona y Málaga (una Biznaga de Plata). Y ahora está en el festival donostiarra, un certamen internacional. Esta singular producción está a caballo entre el moderno documental de creación y un reportaje de periodismo de investigación. Tan directo e inmediato como la vida misma. Así es la película de David Arratibel. ¿De qué trata? Este joven director asiste con estupor a una cascada de conversiones al cristianismo en el seno de su familia. Primero, su cuñado, más tarde, su hermana mayor, su madre, su otra hermana… Él, además de no entender dichos procesos, se siente marginado de algún modo, al no compartir esa experiencia de fe con su familia. Ante esa situación de desconcierto, decide recurrir a lo que conoce: el cine. Así que se pone detrás de la cámara y empieza a grabar para tratar de comprender lo que les ha sucedido. Entrevistas, conversaciones y variados recursos, llamados a hacer emerger o a sugerir, en lenguaje audiovisual, algunos de los misterios que David quiere conocer.
Una vez dicho esto, alguien podría pensar que estamos ante un documental ramplón, sentimental o cargado de lugares comunes. Sin embargo, el tratamiento argumental es muy fino, elegante incluso, y a menudo gira en torno a cuestiones nada banales, como la relación entre belleza y sentido religioso o el valor sagrado de la música. El hecho de que varios miembros de la familia protagonista se dediquen a la música profesionalmente facilita esta sensibilidad, que aporta mucho al documental. En cualquier caso, y dado que el film está atravesado de la misma frescura e inmediatez de la vida, cada cual puede hacer -como está ocurriendo, de hecho- su propia lectura del mismo. Hay quien ve una reflexión sobre la naturaleza de los lazos familiares, otros descubren un film sobre rencores, perdones y heridas sin cerrar, los hay que ven un film genérico sobre la dimensión espiritual del ser humano y su sentido religioso… y es que todas estas cosas están ahí plasmadas. Un pozo sin fondo. Insisto, como la vida misma.