Nacho Labarga | 29 de septiembre de 2018
El mundo del ciclismo se ha movilizado en torno a la figura de Anna González y su lucha «Por una Ley Justa». Exigen el endurecimiento del Código Penal para frenar el número de deportistas muertos en las carreteras.
La carretera es la oficina oficial del ciclista profesional. En ella se entrena, mide su potencia, se esfuerza, fomenta sus retos y vive. Los profesionales de la ruta suelen pasar una media de cuatro horas en la carretera. Pero no solo ellos, los de la élite, se mueven de esta forma. Son miles las personas que se desplazan en bicicleta por España. En los últimos tiempos, esta actividad se ha convertido en un «deporte de riesgo». De ahí que se haya hecho famoso el movimiento «Por Una Ley Justa» (#PorUnaLeyJusta).
Esperemos que entre todos no hayas más muertes impunes en la carretera.Reunión en el Mtr.Justicia #porunaleyjusta pic.twitter.com/TZ1bjoJYYw
— Alberto Contador (@albertocontador) August 27, 2018
En los últimos años ha surgido una madre coraje que abandera esta causa. Es Anna González, quien, al perder a su marido, Óscar Bautista, tras un accidente en 2013 (fue el 21 de octubre, en la autovía de Toledo, cuando fue atropellado por un camión que se dio a la fuga mientras iba en bici al trabajo), se propuso cambiar las leyes para que nadie volviera a sufrir lo mismo. Ahora, después de que muchos deportistas, como Joaquim Purito Rodríguez, Igor Antón o Luis Pasamontes, la apoyaran, se ha sumado a su lucha Alberto Contador, el exciclista español más cotizado de la última década. Él está a la altura de los Nadal, Gasol, Márquez y compañía, pese al episodio del clembuterol por el que cumplió sanción. El pinteño acompañó recientemente a González en una reunión con la ministra de Justicia, Dolores Delgado, para tratar la iniciativa «Por Una Ley Justa». Entiende como nadie que, durante un simple entrenamiento, puede ser adelantado decenas de veces por un coche. Los ciclistas se juegan la vida cada día.
El objetivo de González es que su petición, «Por Una Ley Justa», salga adelante y se modifiquen la nueva reforma legal y el artículo 142 del Código Penal, que regula el homicidio por imprudencia, y el artículo 195, que regula la omisión del deber de socorro. En cuanto al homicidio, propone un tercer apartado que diga que quien «por imprudencia leve causare la muerte de otro, será castigado con la pena de multa hasta tres meses. Si el homicidio se hubiera cometido utilizando un vehículo a motor o un ciclomotor, se podrá imponer también la pena de privación del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores de tres meses a 1 año». De esta forma, se conseguiría que todos los accidentes en los que hubiera una muerte como resultado de una imprudencia fueran a juicio, ya fuera esta grave, menos grave o leve.
En lo que a la omisión del deber de socorro se refiere, quiere que se recupere el castigo, al menos en grado de tentativa, a la persona que abandona a otra aunque haya muerto, «pues el reproche de su repugnante acción no puede depender de la «suerte» de haber matado a su víctima y el sufrimiento de las familias de tener que esperar el resultado de la autopsia y, aún sabiendo que nos perjudica a nivel legal, desear que nuestro marido, padre, hijo, hermano, haya fallecido en el acto, sin sufrimiento».
Ayer en Ribera de Arriba nos visitó Anna González para recordarnos por qué lucha #PorUnaLeyJusta
Si no conoces su historia, escucha ⬇ pic.twitter.com/XjnNFtS4dr
— La Vuelta (@lavuelta) September 10, 2018
En el caso de Anna, la muerte de su marido le supuso un trauma a todos los niveles. También económico, puesto que dejó de recibir los 2.800 euros mensuales que cobraba su marido y tuvo que dejar de vivir en la casa donde lo hacían. Regresó a Lleida y se puso a trabajar en un hotel para poder mantener a sus dos hijos. Han sido muchas las personalidades, como Perico Delgado, Alejandro Valverde o Carlos Sastre, además de las anteriormente mencionadas, las que se han sumado al movimiento «Por Una Ley Justa».
Durante la última Vuelta a España, en la etapa reina de los lagos de Covadonga, también se hizo un homenaje a Anna y su lucha, que es la de todos. De momento, los políticos no han ejecutado sus peticiones, aunque ella reconoce que, en honor a su marido, no descansará hasta conseguirlo. Todos en cualquier momento podemos ser peatones, ciclistas, motoristas, conductores de coche o víctimas. «Por Una Ley Justa» pelea para que ninguna muerte en carretera resulte impune y los abandonos, tampoco.
