Daniel Berzosa
Abogado. Doctor en Derecho por la Universidad de Bolonia (Italia).
Escribir en El Debate de Hoy, y leer a sus colaboradores, ha sido una fuente de alegría, una escuela de aprendizaje.
Todos formamos parte de la democracia y es importante defender el concepto de ciudadanía para todos sin distinción. Se han de exigir responsabilidades; pero se han de respetar los derechos.
Afganistán es la prueba evidente de que el refrán «el hombre es el único animal que tropieza dos veces en la misma piedra» no ha perdido vigencia y de que el estudio de la Historia tampoco.
Resulta incoherente, desolador y preocupante que, habiendo, como hay, tantos centros públicos de enseñanza, no acometan iniciativas específicas para explicar adecuadamente la institución de la Corona y su significación constitucional.
Se han sucedido dos últimas ocurrencias incompatibles con el Estado de Derecho y la separación de poderes. No las han proferido dos anónimos ciudadanos, sino dos ministros del Gobierno.
El derecho a la salud no puede cancelar el derecho a la intimidad. Al margen de las exigencias de la especial protección de la cesión y el tratamiento de los datos de salud; la imposición del «salvocoviducto» establecería un registro general de españoles vacunados y no vacunados.
Ese nuevo mojón no es otro que el escandalosamente inconstitucional, fraudulento e inmoral decreto‑ley del gobierno autonómico catalán.
Según Iván Redondo, no hay límites para la «ventana de Overton», técnica consistente en la manipulación ordenada del público para conseguir cualquier cosa con su aceptación, desde lo que era impensable, inaceptable, impronunciable.