Pedro González
Periodista. Cofundador de Euronews y fundador y primer director del Canal 24 Horas de TVE.
La futura relación UE-Reino Unido no va a ser fácil. El proyecto europeo tendrá que optar entre ser una gran potencia global o desaparecer.
Las medidas acordadas por Pekín y Washington solo servirán para recruceder el conflicto si no se retoman las negociaciones.
La estrategia del peculiar primer ministro se reveló triunfadora, al dar con la clave emocional de la mayoría de los británicos: el hartazgo de una situación que no permitía avanzar en ninguna dirección.
La moderación gana fuerza en Israel con la victoria electoral de Benny Gantz. El apoyo del bloque árabe será clave para la formación de un nuevo Gobierno.
La política británica también se desliza cada vez más por la pendiente del populismo. Ya ha advertido de que en caso de que le presenten una moción de censura urgente, tiene decidida la estrategia para convertirla en inoperante.
Aunque el expresidente de Bolivia declaró dimitir para que la paz social vuelva al país, no fue un gesto de altruismo. La verdadera causa de su caída ha sido la corrupción de la democracia.
El «premier» británico no ha logrado el respaldo necesario de dos tercios en la Cámara de los Comunes para disolver el Parlamento y fijar la cita electoral el 15 de octubre.
El G7 ha puesto en evidencia que ha concluido el viejo orden de cooperación y solidaridad internacional. Se vuelve a los viejos modelos de fuerza, proteccionismo y acuerdos bilaterales.