Pablo Casado Muriel | 28 de julio de 2019
«Mira las estrellas» demuesta que, más allá de espadas láser y naves espaciales, es posible encontrar a Dios en una de las sagas más importantes del cine.
La saga Star Wars está repleta de referencias místicas y de conceptos espirituales. El universo ideado por George Lucas bebe de multitud de fuentes religiosas para dar forma a elementos como la Fuerza, los jedis o el Lado Oscuro. Federico Gómez propone en Mira las estrellas una revisión de las películas atendiendo al afán cristiano de buscar a Dios incluso en lo más insospechado, como puede ser una batalla espacial en torno a la Estrella de la Muerte.
Mira las estrellas
Federico Gómez
San Pablo
168 págs.
14,50 €
El autor parte de la premisa de que Star Wars no pretende hacer referencia al cristianismo; sin embargo, podemos encontrarlas. Aunque empecemos la crítica por el final del libro, la sucesión de cinefórum que se proponen en su último bloque puede ser un gran recurso para campamentos u otras actividades juveniles (ahora que estamos en pleno verano).
Es fácil reconocer el valor cristiano al sacrificio último de Darth Vader en pos de la salvación de Luke, la vuelta del hijo pródigo tras la caída en el terreno de los sith. El villano por antonomasia que más bien podría considerarse un “santo pop”, como explicaba Jorge Martínez Lucena en eldebatedehoy.es.
El interesante trabajo de Federico Gómez intenta ir más allá de esta evidencia y se fija en otros aspectos como el auge y la caída de la Orden Jedi, relacionada aquí con los momentos de mayor debilidad de la Iglesia; o la infancia de los héroes galácticos en el desierto (Anakin Skywalker, su hijo Luke y Rey, protagonista de la última trilogía) y la fuerte presencia de Dios en estos parajes dentro del relato bíblico.
La Vida aparece en los lugares más inhóspitos, como el desierto o el espíritu de un droide, donde nadie esperaría encontrarlaMira las estrellas
De todos los temas que se abordan en Mira las estrellas, especialmente inspirador resulta el dedicado al valor de lo más insignificante en el plan de Dios… y también en el de Star Wars. Todo comenzó en un pesebre de Belén, o en el interior de un anticuado droide, R2-D2, aquel que portaba el mensaje esperanzado de Leia.
Algunos ejemplos, los aquí expuestos, que se amplían y desarrollan con mucha más profundidad en un libro ciertamente interesante. Una visión cristiana para un clásico del cine y todo un icono de la cultura popular. Star Wars puede ser mucho más que espadas láser y naves capaces de alcanzar la velocidad de la luz.
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